La palabra “adaptabilidad” nunca había sido más importante en el mundo de la gastronomía. Hoy, tanto comensales como restaurantes han tenido que adaptarse a un nuevo estilo de vida, nuevas rutinas y nuevos patrones de consumo. No es el momento de tener una actitud pasiva y esperar a que la normalidad regrese, es el momento de renovarnos, mejorar nuestro rendimiento y crecer ante los cambios.
Desde Unilever Food Solutions, queremos compartir con vos las claves para lograrlo, siguiendo uno de nuestros pilares de trabajo: Hacer más con menos. Se trata de entender los recursos que tenemos a nuestra disposición y utilizarlos eficientemente.
#1 Una base, muchas recetas
Los ingredientes definen todo lo que sucede en tu cocina, por eso es importante que aprendas a seleccionarlos. Para hacer más con menos, nosotros te recomendamos reducir la lista de ingredientes que utilizas y centrar tus esfuerzos en aquellos que te permitan crear la mayor variedad de platos posibles con el menor esfuerzo.
De esta forma, reduces la cantidad de desperdicios que generas en la cocina, evitas las compras innecesarias (además de beneficiarte de mejores precios por comprar al por mayor), llevas un mejor control del inventario y facilitas la estandarización de tus procedimientos de preparación.
Un ejemplo perfecto de esto son las Papas en Escama Deshidratadas Knorr: podés usarlas en sopas, purés, frituras, masas, panificados, pastas y más.
#2 Estandariza tus recetas lo antes posible
Si no tienes recetas estandarizadas para cada plato de tu menú, cada vez que el personal de cocina prepare un plato puede cometer errores, generar más desperdicios de los necesarios y enfrentarse a tiempos de preparación excesivos. Todo esto afecta la experiencia de los comensales.
Trabaja codo a codo con ellos para dividir las recetas en una serie de pasos fáciles de repetir y organizar el flujo de trabajo en la cocina. ¡Así podrás ofrecerles calidad consistente a tus comensales y evitarás los procesos innecesarios! Además, contar con pasos definidos para cada plato hará que sea mucho más sencillo estudiar sus características.
Nuestro consejo es que empieces por los platos más populares, así estarás un paso delante de las órdenes que recibas y podrás manejar mejor los volúmenes de venta, tanto a domicilio como localmente.
#3 Reorganizá tu menú
Una vez que tienes recetas estandarizadas, es hora de aplicar la reingeniería de menú para entender a fondo cómo mejorar la eficiencia de tu cocina y la rentabilidad de tus platos. Evalúa constantemente el costo-beneficio de cada uno de los ingredientes que utilizas, los movimientos del personal dentro de la cocina y los tiempos de preparación. Dales especial atención a estos factores para mejorar la productividad rápidamente:
- Rentabilidad y popularidad del plato: ¿Cuánta ganancia deja la venta?
- Complejidad de la receta: ¿Toma mucho tiempo o esfuerzo preparar el plato?
- Uso de materia prima: ¿Se aprovechan al máximo los ingredientes en la receta?
Este enfoque te permitirá descubrir muchas oportunidades de mejora en la cocina, como sustituir ingredientes para reducir el tiempo de preparación de un plato o ajustar el tamaño de las porciones para mejorar la rentabilidad. Por ejemplo, si tus comensales están dejando comida en el plato al terminar, es posible que estés sirviendo porciones demasiado grandes y, por lo tanto, desechando ingredientes innecesariamente.
¡Aplica estos consejos para tomar mejores decisiones en tu restaurante y establecer un modelo de trabajo eficiente!
Mantente atento a nuestras redes sociales para enterarte de nuestras nuevas publicaciones, webinars y materiales que puedes aprovechar para optimizar tus operaciones.
Obtén todo esto:
- Accede a todas nuestras promociones
- Inspírate con las recetas de nuestros chefs
- Descubre las últimas tendencias gastronómicas